En vísperas de una nueva celebración del 1º de mayo, no puedo evitar la sensación de que esto se hunde.
Los datos de la Encuesta de Población Activa del primer trimestre de 2012 no pueden ser mas preocupantes. En España, la tasa de paro se ha situado ya en el 24,44%, un 1,59% más que el trimestre anterior. Estamos hablando de mas de 5.639.000 parados/as, 366.000 más que hace 3 meses. En Canarias, el numero de parados supera ya los 362.000, lo que sitúa la tasa de paro en el 32,28%, solo superada por Andalucía. En relación al trimestre anterior, la población activa ha crecido en 17.200 efectivos, los ocupados han descendido en 3.300 y los parados han aumentado en 20.400. En relación al mismo trimestre del año anterior, la población activa ha aumentado en 27.300, los ocupados son 22.600 menos y los parados/as han aumentado en 49.900 efectivos.
Estamos llegando a una situación limite que cada viernes se ve agravada por las decisiones del consejo de ministros que hasta el momento, ni siquiera han logrado calmar a los mercados y no hacen sino agravar la profunda crisis económica y social en la que estamos inmersos. Los nuevos ajustes anunciados por el gobierno de Canarias para afrontar la perdida de más de 800 millones de euros en los ingresos presupuestados para el ejercicio de este año, como consecuencia de lo previsto en los PGE, nos empujan, aún más, al abismo.
Iñaki Gabilondo en una reciente entrada de su video blog, "Miopía General", destaca la incapacidad de los partidos políticos del gobierno y de la oposición para poner algo en común. Dice que están enfermos de razón y ciegos de fe. Todo es táctica y no se ve mas allá de las próximas dos semanas. Si nuestros dirigentes tuvieran que dirigir el desalojo del Titanic, no se salvaría nadie. Por eso plantea que es el momento de priorizar las ideas y relativizar las criticas porque si esto se hunde, aquí no se salva nadie.
Se trata de que entre todos evitemos el hundimiento de nuestros particulares Titanic y si éstos se producen, al menos tengamos preparado el protocolo de evacuación y acondicionados los botes salvavidas para todos.
En estos momentos, donde en Canarias el desacuerdo en casi todo es ya una norma habitual, se impone mirar a la luna en vez de al dedo y preguntarnos si acaso no es posible establecer un consenso amplio sobre unas bases mínimas para hacer prevalecer el interés general en los grandes retos a afrontar para mejorar la situación actual: Régimen Económico y Fiscal, reforma de las administraciones publicas, reparto del empleo, desarrollo sostenible,...
Creo que tenemos que dejar de ver como las cosas pasan e implicarnos en la búsqueda de soluciones. Precisamente por eso, es necesario salir a la calle, hacer ver nuestro descontento y, al mismo tiempo, ofertar alternativas y proponer acuerdos. Por eso, mañana estaré una vez mas en la manifestación del primero de mayo.
