BANCA Y FINANZAS ÉTICAS

Hoy fui a la conferencia que Joan Melé, subdirector de Triodos Bank, impartió en la Cámara de Comercio de S/C de Tenerife. Yo ya sabía quien era Joan Mele y había visto en internet algunas de sus charlas. Pero no se cómo se habrán tomado algunos empresarios, miembros de la cámara de comercio, oir hablar a un banquero de Kropotkin, unos de los principales teóricos del anarquismo, recomendando la lectura de su libro "El apoyo mutuo".

Y esto sólo fue el aperitivo de lo que vino después, ya que todo su discurso fue rompedor respecto a las teorías dominantes en estos foros. Planteaba que la bondad debe ser una opción de vida frente al imperio de la inteligencia. Volver a los orígenes para educar en valores. Descubrir la relación que hay entre el consumismo y el vacío interior. Buscar el sentido a nuestras vidas dando más relevancia a la transcendencia y la espiritualidad. La meditación ayuda a dar sentido a nuestras vidas.

Frente a los modelos económicos que se enseñan en la universidades defiende un modelo basado en la solidaridad y la cooperación, partiendo del hecho de que nada puede cambiar, si no empezamos por nosotros mismos, sabiendo que con la sufiente fuerza interior, una persona puede cambiar el mundo (Gandhi, Mandela, Luther King). El trabajo como servicio a los demás debe ser la base de la nueva economía.

Son necesario cambios radicales:

• A través de la educación, potenciando la educación emocional, especialmente a través del arte, y la educación de la voluntad basada en "educar haciendo" y facilitando el equilibrio entre la mente, el corazón y el cuerpo.
• A través del uso del dinero en las tres facetas de las compras, el ahorro y las donaciones. Comprando se ejerce mejor la democracia que votando. En ese momento decidimos que realidad puede existir en el mundo. Para hacerlo conscientemente, hay que saber lo que hay detrás del producto y un consumo responsable y sensato debe priorizar los productos ecológicos y locales. Hay que ir a un descenso del consumo material y a un incremento del consumo material. En el ahorro, sucede lo mismo. Cuando llevamos nuestro dinero a una entidad hay que saber lo que van a hacer con él para alinear el dinero con nuestros ideales. La consciencia no se puede ejercer si no hay transparencia. Pero cuando uno tiene mucho dinero, el dinero te tiene a tí. Por eso el dinero también tiene que morir, dando una parte de él, sintiendo la felicidad de hacer algo por los demás. 

El cambio radical implica introducir la ética en todo, también en la banca, evitando que con mi dinero hagan cosas que no me gustan.

Ayer escribía algo sobre la necesidad de contrarrestar el stress de la vida sindical con la meditación. Hoy, un banquero nos hablaba de ética, consciencia, meditación y retrospección diaria de lo que hacemos. Y lo más gratificante es que no cabiamos los asistentes en el aforo habilitado para la charla y se palpaba el asentimiento de la mayoría de los asistentes.