NO NOS HEMOS CALLADO

Acabo de venir de la manifestación de S/C de Tenerife, una de las 50 convocadas hoy en todo el estado por CCOO y UGT. Esta convocatoria también nos ha permitido tener una presencia notable en los medios de comunicación para explicar la posición sindical ante lo que está pasando en el estado español y en Canarias (como muestra, podeis oir la entrevista que me han hecho hoy en el programa "La Trapera" de Radio San Borondón, pinchando aquí).

El texto que me ha servido de base para la intervención final en la manifestación de hoy es el siguiente:

"Compañeros y compañeras, hoy estamos de nuevo en la calle, en todas las capitales del estado español, porque ni nos han callado, ni nos callan, ni nos van a callar. Desde que el domingo 19 de febrero CCOO y UGT convocaron la primera manifestación contra la reforma laboral, no hemos parado de defender nuestros derechos con la movilización, hasta el punto de convocar una huelga general el pasado 29 de marzo.

Nos dicen que es muy difícil mantener el pulso y que hay que parar. Pero tenemos que dejar bien claro que las movilizaciones continuarán hasta donde sea necesario si el gobierno, si los distintos gobiernos, se empeñan en seguir recortando los derechos de los trabajadores y trabajadoras.

En los seis meses que lleva el nuevo gobierno en Madrid, no han parado de hacer uso de la tijera y la situación del país es cada día peor. No han parado de asustar a los ciudadanos para tranquilizar a los mercados. Nos repiten constantemente que las reformas y los ajustes son para crear confianza en las instituciones internacionales y los mercados. Y nada de ello se ha producido, estando ya prácticamente intervenidos.

El rescate del sistema financiero español, puede ser que lo terminemos pagando todos los ciudadanos y ciudadanas, por la incidencia que, al parecer, está teniendo en la subida de la prima de riesgo y por las nuevas condiciones que nos pueden imponer, como consecuencia de este rescate y la intervención del país que se pueda consumar próximamente. Los tiros apuntan a que:

• Van a subir los impuestos indirectos
• Van a reducir las prestaciones sociales (desempleo, pensiones,…)
• Se va a aumentar de inmediato la edad de jubilación
• Se va a reducir el SMI para permitir los minijobs para los jóvenes
• Se pueden despedir hasta cerca de medio millón de empleados públicos
• Se va a aprovechar todas las posibilidades que la reforma laboral ofrece para que se consume una bajada generalizada de los salarios.

Las expectativas son que continúe la recesión económica y el paro siga aumentando y esto nos sitúa ante la posibilidad de un estallido social y de que los valores democráticos salten por los aires.

Frente a ello, los sindicatos y las organizaciones sociales progresistas, volvemos a reiterar la necesidad de que se tiene que producir un giro radical en las políticas que se están llevando a cabo por los distintos gobiernos. Un giro que apueste por la recuperación económica, la inversión pública, el empleo de calidad y la sostenibilidad del modelo social.

Ante un gobierno cada día mas deslegitimado e impotente para afrontar con éxito la creciente situación de incertidumbre y pesimismo, reclamamos que someta sus reformas y recortes, no recogidos en su programa electoral, a una consulta popular. El gobierno del Partido Popular está realizando un fraude democrático porque los ciudadanos votaron un programa y se está llevando a cabo otro. Por eso hemos propuesto la celebración de un referéndum para que los ciudadanos puedan expresar su opinión ante estas políticas.

Desde este planteamiento general, queremos descender a las distintas realidades de los trabajadores y trabajadoras del estado para vincular sus problemas concretos a nuestras denuncias y alternativas globales.

Resulta paradójico la prontitud y disponibilidad con la que se afronta la ayuda a los bancos y la falta de sensibilidad con nuestros mineros. Desde Canarias, queremos enviarles nuestra solidaridad y nuestro aliento y también nuestro pesar por la actuación de un ministro canario que está a punto de acabar con el trabajo y el modo de vida de miles de personas y de comarcas enteras.

Y hablando de los bancos, no podemos dejar de mencionar como hemos perdido, sin enterarnos, el patrimonio público de las cajas de ahorro y lo poco que queda de ellas, la obra social, quieren también expropiarla, al desentenderse de la atención a las familias más necesitadas como las guarderías de Cajacanarias que están a punto de cerrarse, sin que, hasta ahora, el presidente de esta entidad quiera dignarse a reunirse con nosotros.

Los empleados públicos de Canarias tienen que afrontar en los próximos meses una reducción de un 10% de sus salarios, mientras que la prestación de los servicios públicos esenciales se sigue deteriorando, en medio de un crecimiento constante de la tasa de paro y de la pobreza. La suerte que está corriendo en estos días el personal despedido de las empresas, fundaciones y entidades públicas puede ser un anticipo de lo que pueda suceder próximamente con los empleados públicos de las islas.

Pensábamos que con esta manifestación poníamos fin a las movilizaciones durante el verano, pero no va a ser así. Pasado mañana, el frente unitario por la enseñanza pública de Canarias vuelve a convocar manifestaciones en Canarias, coincidiendo con el último día de clase de este curso. Y los trabajadores y trabajadoras del principal convenio de esta provincia, el de hostelería, mantienen su pulso con la patronal, poniendo sobre la mesa una propuesta de un gran calado solidario al plantear renuncias en las subidas salariales que les corresponde a cambio de la creación de empleo en un sector que es el único que mantiene buenos resultados y expectativas. Parece que el interés de la patronal va por otro camino y lo que esperan es que el convenio venza dentro de un año para empezar de cero.

Múltiples conflictos, falta de ilusión y de esperanza. Miedo. Y no podemos permitir que el miedo vuelva a ser una vez más, un instrumento de dominación de las élites. Frente al miedo es necesario mostrar la firmeza de una mayoría que defiende sus derechos pero que deja la puerta abierta para un nuevo contrato social en el que consensuemos el como afrontar la crisis y los costes que tienen que pagar unos y otros. Un nuevo contrato social a nivel de Europa, como el que propone la Confederación Europea de Sindicatos. Pero un nuevo contrato social también aquí, en Canarias.

Estamos dispuesto a hablar de moderación salarial, de medidas especiales para las empresas en crisis,…. Pero también queremos hablar de beneficios, de fraude fiscal, de un sistema impositivo más justo y progresivo. Queremos que unos y otros prioricemos la creación de empleo, el reparto de la riqueza a través del empleo. Que se establezcan sinergias y colaboraciones entre las empresas para que los que trabajamos y producimos en Canarias nos ayudemos unos a otros. Que las excensiones fiscales se justifiquen solo en base al mantenimiento y la creación de empleo en estas islas. Estamos dispuesto a hablar de mejorar la eficacia de las administraciones públicas. Pero todo el mundo tiene que asumir su cuota de responsabilidad y su participación en el sostenimiento del estado del bienestar. No sólo los trabajadores/as, no sólo las rentas del trabajo.

Compañeros y compañeras, vivimos momentos difíciles, de constante incertidumbre. No sabemos lo que va a pasar mañana. Pero lo único que si puede mantenerse inalterable, estable, son nuestras creencias, nuestra confianza en que buscamos lo mejor para todos y todas, en que nuestro supremo objetivo es asegurar el bienestar de todos nosotros y de nuestros hijos. Por eso, vamos a seguir en la brega, no nos vamos a cansar, no nos vamos a rendir ¡Cueste lo que cueste y dure lo que dure!"