Si uno de los objetivos centrales del proceso congresual en el que estamos inmersos es mejorar nuestra presencia directa en los centros de trabajo reforzando lo que algunos denominan "sindicalismo de proximidad", creo que ayer tenía razón cuando en la conferencia de la seccion sindical de CCOO Correos en S/C de Tenerife, decía que para llevar a la práctica el objetivo congresual algo tendríamos que aprender de una sección sindical que ha aumentado su afiliación en estos años de crisis (ha pasado de 863 a 970 afiliados/as) y mejorado los resultados de las elecciones sindicales (ha obtenido 13 delegados/as en las elecciones del 2011, tres más que en las elecciones del 2007), consolidándose como la primera fuerza sindical en Correos (provincia de S/C de Tenerife).
Las buenas prácticas sindicales deben ser la mejor guía para llevar a cabo los cambios que necesitamos en nuestro sindicato. Ayer, en la conferencia de Correos observé que el acto estaba muy bien organizado, mucha cordialidad entre los 29 delegados/as presentes, un balance riguroso del trabajo realizado y un equipo de trabajo cohesionado y joven para seguir llevando la direccion de la seccion sindical.
Vi a unos compañeros/as con un conocimiento riguroso de la empresa, con unos resultados positivos de la acción sindical desplegada a nivel de estado y provincial, pese a las enormes dificultades del momento y con una oferta formativa muy interesante para facilitar tanto la promoción interna como el acceso a trabajar en la empresa.
Pero la clave principal del buen trabajo sindical se destaca en el informe presentado y se basa en la labor diaria de presencia en los centros de trabajo, ya que "la primera obligación de los cuadros sindicales que están al frente de la sección sindical es la de estar en permanente contacto con los/as trabajadores/as en general y con los afiliados/as en particular, acudiendo de forma cotidiana a los centros de trabajo".
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