Acabo de terminar la lectura de este libro de memorias que parece también una novela, escrito por Sara Velasco, una de las integrantes de "los médicos de Tijarafe" una especie de "comuna médica" que en 1978 se hizo cargo del consultorio de este pueblo del noroeste de la isla de La Palma.
Recuerdo haber oído hablar de esta novedosa experiencia de medicina rural cuando iba a mi casa de El Paso por esa época y a algún activista del Partido Comunista (creo saber quien es el personaje que en el relato se llama Óscar).
Supongo que las referencias al líder del Colectivo Autogestionario de Medicina Blanda se concretan en el nombre de Alfredo Embid, fallecido en el 2014, que a finales de los 70 y los inicios de los 80 tuvo una presencia muy activa en Tenerife en el ámbito de la acupuntura y otras medicinas blandas.
El libro me ha trasladado momentáneamente a esa época de finales de los 70 en los que salíamos de la oscuridad y parecía que algunos sueños utópicos se iban a hacer realidad. Los "médicos de Tijarafe" consiguieron hacer posible algunos de estos sueños durante algún tiempo. Gracias a este libro se ha podido rescatar esta experiencia del olvido e incluso compartirla con otros participantes 38 años después.
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