¿Qué es y como funciona el Frente Amplio del Uruguay?
El deseo siempre insatisfecho de la unidad de la izquierda, nos lleva a los que nos movemos en ese espacio político ajeno al PSOE que se puede calificar como de izquierda y progresista, a un estado de casi permanente frustración y melancolía combinado, a veces, con un sentimiento cuasi religioso de esperanza en un impulso redentor o "un mesías" que ponga tras de sí a las huestes progres dispersas y "meta en vereda" a los abundantes profetas que sólo aspiran a ser cabezas de ratón de sus respectivas tribus, más o menos revolucionarias.
Ya he escrito varias veces sobre este tema a propósito de un encuentro esperanzador que se celebró a finales de 2022 de distintas fuerzas de izquierda de Canarias, la imposibilidad de conseguir una coalición amplia para presentarse a las elecciones municipales y autonómicas de Canarias en el 2023 (creo que en este análisis cometí el error de no saber valorar la terrible derrota que ello supuso para la izquierda en general en Canarias y para Unidas Si Podemos) y una primera valoración de lo que suponía la aparición de Sumar y mi visión de como se debía afrontar los procesos de confluencia en la izquierda (Abril 2023) que yo sintetizaba en el título: "Unidad a fuego lento".
Diversas son las experiencias que hemos tenido en el estado español de confluencias de fuerzas políticas progresistas y de izquierda, empezando por el mítico Frente Popular que se presentó a las elecciones de 1936 en la II República Española. En la actual etapa democrática, las experiencias más notables a nivel de estado han sido la de Izquierda Unida (actualmente es un partido que al mismo tiempo es una federación de partidos), Unidas Podemos y la coalición SUMAR que actualmente parece que deriva hacia la conformación de un partido nuevo: Movimiento Sumar, a la vez que se mantiene como coalición. En el campo nacionalista no podemos dejar de nombrar otra experiencia mítica en Canarias: la Unión del Pueblo Canario y dos experiencias actualmente exitosas como el Bloque Nacionalista Galego y EH-Bildu.
Creo que procede estudiar todos estos casos con la debida calma y sin ningún tipo de prejuicio o ideas preconcebidas. Seguro que de los éxitos y fracasos detectados llegaremos a conclusiones realmente útiles para el momento actual. En cualquier caso, no podemos dejar de mencionar a una experiencia paradigmática que aún pervive con éxito en Uruguay: el Frente Amplio. El vídeo que se adjunta es de hace más de 8 años, pero creo que nos da una visión muy certera de lo que es y cómo funciona esta organización que nació como una coalición de partidos de centro (democracia cristiana) y de izquierda pero que se ha desarrollado como un movimiento. Quizás aquí está la clave de su éxito. Sin llegar a ese nivel, en el caso de EH-Bildu también podemos encontrar una senda parecida (ver su documento organizativo).
En la ciudad donde vivo, existe desde hace casi 10 años una interesante experiencia denominada "Asamblea Ciudadana Lagunera" que se constituyó como un movimiento social que dio lugar posteriormente a una coalición electoral denominada Unidas Se Puede, constituida por los partidos Izquierda Unida, Si Se Puede y Podemos (inicialmente también estuvo presente Equo). Aunque es difícil mantener el equilibrio entre movimiento social (ACL) y coalición electoral (USP), la Asamblea Ciudadana mantiene el espíritu de movimiento social de base, abierto a otros movimientos sociales (vecinales, ecologistas,...) donde se puede participar aunque no seas miembro de algunos de los partidos de la coalición. Y ello es así porque mantiene su entidad propia, la adscripción es individual (no porque seas miembro de algún partido de la coalición), los candidatos/as a las elecciones municipales se eligen en primarias y el pleno de la asamblea y su comisión permanente fiscaliza el trabajo de los concejales y concejales de Unidas Se Puede.
Creo que ya hemos dado unas pistas para alcanzar un par de conclusiones, siempre provisionales, sobre esto de los frentes amplios y las confluencias: la unidad se alcanza en procesos que surgen desde "abajo" y que toman la forma de movimientos sociales compatibles con las necesarias coaliciones electorales donde no se puede obviar el papel de los distintos partidos progresistas y de izquierda y se requiere paciencia, mucha paciencia...
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