La señora no paraba de lanzar improperios contra Pedro Sánchez y el gobierno. ¿Dónde están las rebajas de los alimentos que nos ha prometido el gobierno? La empleada de Mercadona la alentaba y le daba la razón....
Meses antes el vecino discutía con mi mujer cuando ella se atrevió a decir que Mercadona pagaba muy bien a sus empleados. Él había perdido su trabajo por culpa de Mercadona y clamaba airoso que esta cadena de Supermercados había arruinado a muchos pequeños comerciantes y empleados de otros negocios en Canarias...
Ione Belarra llamaba "empresario despiadado" a Juan Roig, propietario de Mercadona y le llovían palos por todos lados, en los medios de comunicación "oficiales". Rememoro otras críticas a este paladín del empresariado español en las que se le acusaba de prácticas cuasi-sectarias con sus empleados a cambio de pagar unos salarios más elevados en el sector y de comportamientos anti-sindicales. Un titular de hace años me recuerda sus vinculaciones con el PP.
Me planteo, una vez más, el dejar de ser un espectador de todos estos debates y me propongo pasar a la acción. ¿Cómo?
Pues me respondo que lo que está en mi mano es empezar a tomar decisiones como consumidor. Vamos, a convertirme en un consumidor militante. El Mercadona cercano a mi casa ha perdido un cliente pero se me está empezando a ver más en la frutería del barrio, en el supermercado de una cadena canaria y en el mercado municipal.
- Consumir productos de cercanía, cultivados o elaborados en mi tierra.
- Velar por la mejor calidad posible de esos productos (ecológicos, reducción de envases, calidad dietética,...).
- Precios razonables.
- Respeto al medio ambiente.
- Respeto a los derechos humanos.
- Empresas locales que tratan bien a sus empleados.
- Priorizar las pequeñas empresas y los comercios de barrio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario