El pasado sábado se clausuraba nuestro IX Congreso y se abría un nuevo mandato de cuatro años para desarrollar el programa de acción acordado.
El congreso se desarrolló compartiendo el recuerdo de nuestras "raices", reafirmando nuestros "valores" y preparándonos para afrontar los cambios necesarios para abrirnos paso por las dificultades actuales hacia un futuro mejor, los nuevos "horizontes".
Se aprobó el informe general donde se daba cuenta de la gestión realizada en los últimos cuatro años, tras un debate muy intenso sobre los principales ejes en los que se centró nuestra actividad: concertación social, movilizaciones, finanzas del sindicato, servicios jurídicos, formación para el empleo, cohesión interna e indicadores de gestión (afiliación y elecciones sindicales).
Se aprobó el programa de acción para los próximos cuatro años en el que se define como actuar en la sociedad con propuestas sindicales para abordar la crisis en Canarias relacionadas con los efectos de la globalización, el estímulo del crecimiento económico y la creación de empleo, el cambio de modelo productivo, la recuperación de los derechos laborales y el modelo social necesario en nuestras islas. También se abordan los cambios necesarios en el sindicato para hacer frente a los nuevos tiempos: la organización de la afiliación, la recuperación de los niveles de afiliación perdidos, los servicios del sindicato, la estructura organizativa y los órganos de dirección, la comunicación y la gestión de nuestros recursos. Se tratan de cambios necesarios vinculados a una renovación ética del sindicalismo.
Las tareas inmediatas de la nueva dirección están determinadas por la resolución general aprobada en el congreso. Esta resolución parte del análisis de la grave crisis en la que estamos inmersos: paro, exclusión social, políticas ultraliberales, dogma del control del déficit público, equilibrio imposible de las cuentas públicas,...
Este contexto hace necesario un cambio urgente basado en un cambio de prioridades para centrarlas en el crecimiento y en el empleo y en el diálogo para evitar mayor conflictividad laboral y social.
Ello se puede conseguir desarrollando acuerdos creíbles y realizables en torno a los siguientes ejes:
- Plan de inversiones públicas centradas en el turismo/construcción, formación y energías renovables que requiere una reforma del marco fiscal canario, una mayor eficiencia en el gasto público y un margen razonable de déficit público.
- Extensión y mejora de los niveles de protección social.
- Impulso de nuevos procesos de negociación colectiva para evitar el fin de la ultractividad en los convenios y se subsanen los perjuicios derivados de la pérdida de la función reguladora de los convenios colectivos provinciales tras la última reforma laboral.
Comisiones Obreras es un sindicato del diálogo y de la propuesta y salimos del congreso con la firme convicción de dar una nueva oportunidad al acuerdo. Pero con la misma firmeza y convicción recurriremos a la movilización si no se produce el giro en las políticas sociales, laborales y económicas que estamos reclamando y una mayor disponibilidad de las patronales para resolver los problemas existentes en la negociación colectiva.
Esa apuesta por el diálogo pero también por la movilización se hace extensible a nuestra defensa de los servicios públicos esenciales y nuestro rechazo a las privatizaciones.
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