Ayer vi en La 2 este documental sobre la extraordinaria labor que un periodista norteamericano, Varian Fry, realizó entre 1940 y 1941 en la Francia colaboracionista del régimen de Vichy para proteger y facilitar la huida a los representantes más importantes de la cultura europea perseguidos por los nazis. Entre ellos se encontraba nuestro inmortal pintor Óscar Domínguez. Debido a ello a Varian Fry se le conoce como el Schindler de los intelectuales.
En unos momentos en los que tengo la impresión de que los valores perennes se ponen en cuestión, me conmueven estas historias de personas normales y corrientes que tuvieron la valentía y el coraje de ayudar a las víctimas de las maquinarias de poder que han intentado aplastar los valores humanos.
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